Género: Drama
Nacionalidad: USA
Director: Martin Scorsese
Actores:Daniel Day-Lewis, Michelle Pfeiffer, Winona Ryder, Linda Faye Farkas, Michael Rees Davis, Terry Cook, Jon Garrison, Richard E. Grant, Alec McCowen, Geraldine Chaplin, Mary Beth Hurt, Stuart Wilson, Howard Erskine, John McLoughlin, Christopher Nilsson, Clive Swift
Productor: Barbara De Fina
Guión:Edith Wharton, Jay Cocks
Fotografía: Michael Ballhaus
Música: Elmer Bernstein
La edad de la inocencia supuso un cambio total con respecto al cine que Martin Scorsese tenía espléndidamente acostumbrados al planeta entero. Se trataba, nada más y nada menos, que de adaptar una novela de Edith Wharton a la gran pantalla, en este caso, la novela en cuestión trataba sobre las relaciones entre personajes de la alta aristocracia del Nueva York de finales del siglo XIX. Es decir, que aquí ya no habría gángsters, perturbados mentales, o boxeadores embrutecidos; sino una historia que perfectamente pudieron haber adaptado directores más afines a este tipo de cine, es decir, gente como James Ivory, Stephen Frears, etc. Scorsese, de tal modo, sorprendió a propios y extraños al elegir este proyecto, pero, como él mismo dijo, la intrincada red social de la Nueva York de aquellos tiempos no era muy diferente de las jerarquías entre mafiosos.
La película, en mi opinión, es de las mejores de este cineasta, porque no sólo recoge espléndidamente cuáles eran las relaciones entre los individuos de la clase alta de la ciudad (nobles, abogados, empresarios...) sino que contiene una de las mejores historias de amor que yo he visto en una película. Los desequilibrios emocionales entre el abogado Newland Archer (un magnífico Daniel Day-Lewis, uno de mis cinco actores favoritos) y la condesa Olenska (perfecta Michelle Pfeiffer), debido al próximo matrimonio de Archer con la joven aristócrata May Welland (Winona Ryder, en su época dorada), son casi desgarradores, y detrás de todos los gestos afectados de educación y cortesía de la nobleza con la liberal y "moderna" condesa Olenska, podemos intuir perfectamente las bajezas, los celos y las envidias de toda una clase próxima a su decadencia. Archer, totalmente al margen de este universo de sentimientos ocultos, se enamora perdidamente de Olenska, a pesar de que está prometido con May Welland en matrimonio, y el enorme peso de su posición social le impiden gritar a los cuatro vientos sus sentimientos más escondidos. El momento más emotivo y maravilloso del filme lo encontramos en la escena en la que Day-Lewis ve a lo lejos la figura de Olenska recortada en el puerto, mirando al mar, frente al sol rojo del ocaso y de espaldas a él. Sus pensamientos (narrados en off) nos dicen "si ella se gira, y me mira, lo dejaré todo y me iré con ella...". ¿Se girará Michelle Pfeiffer? Ved la película, y lo comprobaréis.

Scorsese demostró con este filme, que, definitivamente, es de los grandes.
Valoración: un
10. Aunque sólo sea por esta escena.